El valor de suffering10: 00 18/02/2010, Ed Halliwell, el budismo, el comentario, el comentario es libre, guardian.co.uk, filosofía, religión, noticias

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Si somos capaces de seguir un camino medio a través del sufrimiento, ni revolcarse en él ni ignorarlo, puede ayudarnos a crecer

La pregunta: ¿El sufrimiento mejorar nosotros?

Tal vez una de las quejas más comunes dirigidas a los budistas es que estamos "en" el sufrimiento. Anexo A de la acusación es la noble verdad del Buda, en primer lugar, a veces traducida como "la vida es sufrimiento". En realidad, una representación mejor es "no está sufriendo" - una declaración simple del hecho de que como seres humanos, es inevitable experimentar el dolor de nacimiento, envejecimiento, enfermedad y muerte.


Pero esto es sólo un punto de partida en el camino - la afirmación del Buda es que si estamos dispuestos a investigar con valentía en lugar de alejarse de esta verdad, podemos empezar a entenderlo, y, por lo que la promesa se va, comienza un viaje de la trascendencia que conduce a la liberación de alegría. Nobles Verdades tres y cincuenta y ocho de sonido mucho menos sombrío.


En otro de enseñanza, el Buda explicó que hay dos tipos de sufrimiento, que él comparaba con un disparo con dos flechas. La primera flecha - enfermar, envejecer, a morir - no podemos hacer nada, pero en lugar de aceptar y trabajar con esta verdad, en lugar voluntariamente nos disparan a nosotros mismos con otra flecha - el dolor auto-infligido de resistir a nuestra situación. No sólo envejece, nos enfadamos a envejecer.


Si, en cambio, podemos aprender a apreciar cada momento de placer y dolor con interés y la ecuanimidad, a continuación, incluso la primera flecha ya no tiene que ser un problema. Si podemos cambiar nuestra perspectiva sobre el sufrimiento, ya no sufrir. La experiencia humana, que no sólo comprende el dolor, pero la capacidad de comprensión de nuestra condición, proporciona una oportunidad ideal para motivar a nosotros mismos hacia una mayor iluminación.


Más fácil decirlo que hacerlo, por supuesto. Recuerdo la primera vez que un psicoterapeuta me dijo que yo estaba teniendo un "gran avance nervioso" - fue ella la que quería lanzar flechas a. Incluso ahora, cuando estoy en medio de la depresión, estoy obligado a mirar con ceño oscuro a nadie que se atreva a decirme que estoy teniendo una experiencia de aprendizaje. Pero están en lo cierto - como la mayoría de nosotros, yo soy un animal de costumbres, en gran parte contraproducente, y es por lo general sólo cuando estoy lo suficientemente motivados por el sufrimiento que estoy dispuesto a ver cómo podría infligir sobre yo mismo. Si no hubiera sido provocada por la angustia, probablemente todavía estaríamos viviendo la vida superficial que tenía hace 10 años.


Ciertamente no estoy contento de estar propensos a la depresión, pero sí apreciar la vida más rica que me ha impulsado a la. Aun cuando no se siente como no puedo hacer nada, pero ver a mi mente el ataque en sí, sólo que la capacidad misma de paso fuera de mi propio proceso de pensamiento - desarrollado a través de la meditación - es una mejora enorme en donde yo solía ser.


Y ese es el punto crucial. No es que el sufrimiento en sí es positivo - no lo es, y debemos trabajar en cualquiera de sus formas en que pueden disminuirla. El Buda trató y rechazó las prácticas extremas de auto-inanición y el ascetismo que eran (y en ocasiones todavía lo son) considerados rutas para la realización espiritual. No hay más que suficiente en torno a la miseria ya - según las enseñanzas budistas, lo experimentamos cada vez que nuestras mentes están fuera de sincronía con la realidad, cuando la forma en que quiere que las cosas se entra en colisión duro con las cosas como son. Pero ese choque es nuestra llamada de atención - sin él, la mayoría de nosotros seguiremos sonámbulo a través de nuestras vidas, tal vez hasta que estamos a punto de morir.


Nosotros aún podemos escoger a enterrar la cabeza en la arena, no importa cuánto dolor nos hace y nos rodean. Pero si podemos empezar a dirigir el camino del medio a través del sufrimiento, ni revolcarse en ella, ni el desconocimiento, sino observar y responder a ella, entonces no tiene ningún valor. ¿Mejora de nosotros? No necesariamente. Pero puede impulsarnos a hacer cambios que reduzcan el aguijón del dolor de la vida.

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